La GRAFOLOGÍA es una herramienta usada desde el siglo XVII tal y como la usamos actualmente, gracias al abate francés Juan Hipólito Michón.

Pero la relación entre escritura y personalidad han estado íntimamente ligadas desde mucho tiempo atrás, Aristóteles, en la Antigüedad, decía que

“La escritura es un símbolo del habla y la experiencia mental”,

donde ya dejaba entrever que pensamiento, temperamento  y personalidad se tallan en nuestros signos escriturales.

A día de hoy, en el análisis grafológico, estudiamos 8 grupos:

  1. Forma
  2. Tamaño
  3. Inclinación
inclinacion

imagen tomada de cookingideas.com

    4. Dirección de línea

direccion de linea

imagen de google.com

 

      5. Cohesión

      6. Presión

      7. Velocidad

      8.Márgenes

 

 

Cada uno de estos aspectos nos da una información concreta  sobre la personalidad de la persona que escribe, aspectos tales como:

Grado de Introversión o Extraversión, Capacidad de Liderazgo o Sumisión, Organización y Planificación, Ganas y capacidad para alcanzar los objetivos que nos  propongamos, Nivel de detalle u observación, entre otros datos.

 

Otra parte fundamental en cualquier análisis grafológico que se precie es la FIRMA

firmas ejemplo

 

 

La FIRMA es el fiel reflejo de nosotros mismos, de nuestro mundo interior, de nuestros valores y manera de ver la vida.

Es tal la importancia de la firma, que a fecha de hoy sigue teniendo un peso específico  en situaciones como:

  1. Cuando nos confirman un préstamo bancario, debemos firmarlo en todas las páginas del contrato.

 

hipoteca

 

  1. Cuando estamos de vacaciones en un hotel, y hacemos un cargo a la habitación, también debes firmar la comanda cuando llega el servicio de habitaciones,

hotel firma

 

  1. En el DNI, pasaporte, nuestra firma está plasmada.

dni

 

DATO CURIOSO

Coja un papel en blanco y firmelo

¿Le gusta? Bien.

Intente cambiar algún aspecto de su firma, p. e. la letra más grande, evitar subrayar en el caso de que haya unas línea por debajo del nombre, modifique cualquier elemento de su firma

¿Qué tal se siente ahora? ¿Le sigue gustando? Posiblemente no.

La razón, es que la escritura, como proceso interno y profundo que es, cuando intentamos forzarla por la razón que sea, nos cuesta, nos supone un esfuerzo mental, y con el resultado no estamos cómodos, no nos sentimos identificados.

Digamos que la orden para ese cambio es Externa.

En cambio, cuando vivimos situaciones que nos marcan profundamente, normalmente, también marcan nuestra escritura, nuestra firma concretamente.

Digamos que la dirección de esta orden es INTERNA.

 

 

Gracias por leernos y compartir.